Prologo de un poeta que ya murió sin ver la muerte

Mi poesía es un grito en la oído del hereje que es ciego, el anuncio de la muerte que vive para irse conmigo a un baile de versos y estrofas que nacen de mi mano que me lleva de vuelta a al vida para perturbar con lo que sale de mi boca, de mis poros, de mi lengua anticuaria difuminada por el tiempo, por mis dedos grises de mis manso mas grises todavía

martes, 6 de julio de 2010

Sueños


Como los amaneceres llegan
mis ojos se abren
a la vida que nace

Borrando con mis manos
las lluvias y las nubes
que me detienen

Las ventanas se abren
como un rayo de esperanza
que crece en la oscuridad
de un mundo sin luz
ni esperanza alguna

Escucho el bien del mundo
rozar mi oídos y mi alma
la respiración del universo
un exhalar de vida nueva

Cierros los ojos recorriendo
todo el mundo con el viento salvaje
como un alma libre

Quiero llegar hasta ti
para que seas las almas
que solo felicidad completa son

Veo en las noches las estrellas
sin su manta nocturna
negra de nubarrones
bailo con ellas
sin vida sin nada

Desearía que fuera para siempre
y no solo otro sueño

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